TURISMO RURAL Y PESCA DEPORTIVA
En el dia del Turismo, y finalizada la temporada de pesca 2024, que ha sido nefasta, según el Presidente de la Real Asociación Asturiana de Pesca Fluvial reflexionamos sobre la oportunidad de analizar ámbitos de mejora posibles para recuperar esta actividad turística tan significativa en tiempos pasados
“La Organización Mundial del Turismo (OMT) define el turismo rural como una actividad turística en la que la experiencia del visitante está estrechamente relacionada con una amplia gama de productos vinculados a la naturaleza, la agricultura, las formas de vida y las culturas rurales, la pesca con caña y la visita a lugares de interés.” Entre estas actividades, se destaca de manera específica la pesca con caña, una práctica que en Asturias ha tenido un papel significativo, especialmente en los ríos salmoneros.
Tradicionalmente, los turistas acudían a Asturias, desde el río Eo hasta el Cares-Deva, atraídos por la oportunidad de disfrutar de su actividad preferida: la pesca con caña. Algunas localidades emblemáticas como SanTirso de Abres, donde a la actividad de pesca se une la estancia en las Cabañas de Amaido, Cornellana con Casa Grana, Arriondas que era la «Capital salmonera de España», sin olvidar Cangas de Onis con mas de cuatro guias ,Niserias con el hotel rural “Casa Julián , todos ellos puntos de referencia para este Turismo de Experiencias, que se realizaba de manera respetuosa y sostenible.
Los ribereños, conocedores del rio actuaban como asesores para los pescadores mientras los Guardarríos eran Guias turísticos y los los Centros de precintaje eran responsables de controlar los cupos, tamaño de las capturas, hora de pesca…un Observatorio de Pesca que permitía hacer un seguimiento con datos reales, mientras que las tiendas de pesca , («El Pescador» se mantiene) servían como lugares de encuentro para tertulias y recomendaciones entre pescadores y aficionados. Al llegar septiembre, se formaban los equipos de pesca, se realizan los sorteos de cotos y se renueva la normativa, iniciando un ciclo anual de actividad.
Con el tiempo, sin embargo, la pesca con caña ha experimentado un notable declive y no es momento para celebraciones. Saneamientos parciales, descuidado del bosque de ribera , presencia de especies depredadoras, abandono de sendas de pescadores y refugios … el cambio climático y una gestión poco atrevida , ha coincidido con una disminución en la población de peces. A medida que la situación se deterioraba, muchos pescadores adoptaron la modalidad de pesca y suelta (catch and release). Esta práctica, que implica devolver al agua los peces capturados para preservar las poblaciones, ha ganado popularidad como una forma de contribuir a la conservación de las especies y los ecosistemas fluviales. Aunque la pesca y suelta ha sido bien recibida por quienes desean proteger el medio ambiente, también ha supuesto un cambio en la cultura tradicional de la pesca en la región.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos por hacer repoblaciones e implementar la pesca y suelta, no tenemos recuperación de las poblaciones de peces. A medida que los ríos se utilizan para nuevos propósitos, las previsiones para la pesca con caña del próximo año 2025 no son optimistas, lo que añade incertidumbre al futuro de esta tradicional actividad en la región.
Saneamiento integral, protección de cauces y riberas, reducir presencia de especias invasoras o depredadoras, márgenes accesibles, regulación , información…para tener un producto turistico auténtico y único que se esta perdiendo